Si duermes así estás cometiendo un error
Dormir es una necesidad vital para la salud y el bienestar. Sin embargo, la posición en la que dormimos puede influir significativamente en la calidad del descanso y en nuestro cuerpo. Una de las posiciones más comunes, pero también de las más polémicas, es dormir boca abajo. Aunque para algunas personas puede resultar cómoda, lo cierto es que puede traer consigo una serie de consecuencias negativas para la salud.
En este artículo descubrirás qué efectos tiene dormir boca abajo, por qué los especialistas no la recomiendan, cuáles son las consecuencias a corto y largo plazo, y qué alternativas puedes adoptar para mejorar tu descanso y cuidar tu cuerpo.
¿Por qué algunas personas prefieren dormir boca abajo?
Para muchos, esta posición resulta relajante. Algunas personas la adoptan de manera natural desde la infancia. Además:
- Pueden sentir que les ayuda a reducir los ronquidos.
- Se asocia a una sensación de mayor seguridad o confort emocional.
- En ocasiones, ayuda a quienes tienen reflujo gastroesofágico si se combina con una ligera inclinación de la cama.
Sin embargo, lo que parece ser una ventaja momentánea, a la larga puede convertirse en un problema.
Consecuencias de dormir boca abajo
Los especialistas en medicina del sueño y ortopedia coinciden en que dormir boca abajo no es la mejor opción. Estas son algunas de sus principales consecuencias:
1. Dolor cervical
Al dormir boca abajo, la cabeza debe girar hacia un lado para poder respirar. Esto provoca una torsión en el cuello que, mantenida durante varias horas, puede generar rigidez, dolor cervical e incluso problemas en los nervios.
2. Problemas en la columna
La posición boca abajo obliga a la columna vertebral a adoptar una postura antinatural, sobre todo en la zona lumbar. Esto puede ocasionar:
- Lumbalgia (dolor en la zona baja de la espalda).
- Compresión de los discos intervertebrales.
- Mayor riesgo de hernias discales con el tiempo.
3. Presión en órganos internos
Al apoyar el peso del cuerpo sobre el pecho y el abdomen, los órganos internos reciben presión constante. Esto puede afectar la respiración y dificultar la circulación sanguínea.
4. Dificultades para respirar
Al dormir boca abajo, el tórax queda comprimido, lo que impide la expansión completa de los pulmones. Esto reduce la oxigenación y puede alterar la calidad del sueño.
5. Aparición de arrugas faciales
El contacto directo y prolongado del rostro con la almohada favorece la aparición de arrugas prematuras y marcas en la piel.
6. Hormigueo y entumecimiento en extremidades
Esta posición puede comprimir nervios y vasos sanguíneos, lo que provoca sensación de hormigueo en brazos o piernas al despertar.
7. Riesgo para embarazadas
En mujeres embarazadas, dormir boca abajo no es recomendable porque aumenta la presión sobre el abdomen y puede afectar el flujo sanguíneo hacia el bebé.
¿Dormir boca abajo tiene algún beneficio?
Aunque los riesgos superan a los beneficios, algunos especialistas reconocen que esta posición puede:
- Disminuir los ronquidos.
- Reducir episodios leves de apnea del sueño.
No obstante, estos beneficios pueden lograrse también con otras posiciones más saludables, como dormir de lado.
Alternativas más saludables para dormir
Si eres de los que suele dormir boca abajo y quieres mejorar tu descanso, estas son algunas alternativas:
1. Dormir de lado
Es considerada la posición más recomendable. Dormir de lado (preferiblemente del lado izquierdo) favorece la digestión, mejora la circulación y reduce los ronquidos.
2. Dormir boca arriba
Es ideal para mantener la columna alineada. Además, evita arrugas en la piel. Sin embargo, puede favorecer los ronquidos en algunas personas.
Consejos si no puedes dejar de dormir boca abajo
Si te resulta muy difícil cambiar de posición, puedes seguir algunos consejos para reducir los efectos negativos:
- Utiliza una almohada delgada o incluso prescinde de ella para reducir la torsión en el cuello.
- Coloca una almohada bajo la pelvis para disminuir la presión en la zona lumbar.
- Realiza estiramientos suaves al despertar para relajar cuello y espalda.
- Alterna entre dormir boca abajo y de lado hasta acostumbrarte al cambio.
Lo que dicen los especialistas
Los expertos en sueño afirman que, aunque lo más importante es dormir las horas necesarias, la posición influye en la calidad del descanso. Dormir boca abajo puede empeorar problemas de espalda, cuello y circulación, por lo que recomiendan entrenar al cuerpo para adoptar posturas más saludables.
Conclusión
Si bien dormir boca abajo puede parecer cómodo para algunos, las consecuencias a largo plazo incluyen dolor cervical, problemas de espalda, presión en órganos internos y arrugas prematuras. Por ello, los especialistas aconsejan optar por posiciones más saludables como dormir de lado o boca arriba.
Recuerda: un buen descanso no depende solo de las horas que duermes, sino también de la posición en la que lo haces. Cuidar la postura al dormir es cuidar tu salud presente y futura.